Dupont, Washington— Al menos seis personas murieron después de que un tren de Amtrak que inauguraba una ruta más rápida se descarriló en un puente al sur de Seattle a una velocidad estimada de 128 kilómetros por hora (80 mph) y algunos de sus vagones cayeron a la autopista que corre debajo.
A bordo del ferrocarril viajaban 77 pasajeros y siete miembros de la tripulación al momento en que 13 vagones se salieron de las vías. Al menos 50 personas fueron hospitalizadas y más de una decena sufrió de heridas graves o críticas, de acuerdo con las autoridades.
Un funcionario con conocimiento de la investigación dijo a The Associated Press que una evaluación preliminar indica que el tren 501 pudo haberse impactado con algo antes de descarrilarse a unos 64 kilómetros (40 millas) al sur de Seattle. El funcionario habló bajo condición de anonimato debido a que no estaba autorizado para tocar el tema de manera pública.
La jefatura de policía del condado Pierce dijo que los vagones impactaron a varios vehículos que transitaban por la Interestatal 5, lesionando a varios conductores sin que se reportaran decesos.
En una comunicación radial inmediatamente después del accidente, se escucha al conductor decir que el tren salía de una curva y cruzaba el paso elevado sobre la Interestatal 5 cuando se descarriló. El audio del centro de operaciones también indicó que el maquinista sobrevivió aunque presentaba sangrado en la cabeza y severa inflamación en ambos ojos.
“Aún intento averiguar lo sucedido. Hay vagones por todos lados y en la autopista”, le dice al operador, que le pregunta si todos están bien.
Aleksander Kristiansen, un estudiante de intercambio de 24 años que asiste a la Universidad de Washington procedente de Copenhague, viajaba a Portland para conocer la ciudad.
“Venía saliendo del baño cuando ocurrió el accidente. El vagón en el que venía comenzó a sacudirse muy, muy fuerte. Había cosas cayendo de las repisas. Sabías de inmediato que no era algo leve”, relató.
La parte trasera de su vagón quedó abierta por completo al separarse del resto del tren, por lo que él y otros pasajeros pudieron salir y resguardarse. Su vagón estaba en medio del tren, el sexto o séptimo y fue “uno de los afortunados”, dijo.
Daniella Fenelon, de 19 años y originaria de California, realizaba un viaje por todo el país durante sus vacaciones de invierno. Dijo que iba dormida al momento del accidente.
“De repente se sintió una sacudida, y no sabía qué estaba sucediendo”, dijo Fenelon. Se golpeó con el asiento de enfrente y la ventanilla se rompió, comentó Fenelon, quien recibió asistencia y fue dada de alta del hospital después de que se le diagnosticara una posible conmoción cerebral.
El doctor Nathan Selden, neurocirujano de la Universidad de Ciencia & Salud de Oregon en Portland, dijo que él y su hijo conducían por el lugar del accidente en su trayecto rumbo a Seattle. El médico se ofreció a ayudar y fue llevado hasta una carpa médica instalada en medio de la autopista.
Los heridos más graves ya habían sido trasladados, pero algunos de los pacientes a los que atendió aparentemente sufrieron cortadas en la cabeza, fracturas en pelvis y piernas, y esguinces en el cuello, comentó Selden.
Dijo que fue un milagro que un niño que vio en el lugar parecía estar completamente ileso.
El presidente Donald Trump mencionó el descarrilamiento para pedir un mayor gasto en infraestructura en un mensaje publicado en Twitter tres horas después del accidente. Dijo que el incidente demuestra “hoy más que nunca por qué el plan de infraestructura que presentaremos próximamente debe ser aprobado rápidamente”. El accidente ocurrió sobre un paso elevado inaugurado recientemente.